Primero aromatizamos la leche con la piel de limón, la canela y demás especias llevándolo al fuego como si fuéramos a hacer una infusión.

Si tenemos tiempo de dejarlo reposar, mejor, agarrarán mejor los sabores. Lo llevamos al fuego, añadimos el azúcar o endulzante favorito y por último el agar- agar. 2 minutos hirviendo y listo. Podemos apagar, servir y dejar enfriar.

Luego a la hora de comerlo, le quedan muy bien unas virutillas de chocolate. Esto último ha sido a petición popular… no hay más que hablar.

Un postre sano, rápido y fácil.